Leyendo una entrada de Nestor Melgarejo, miembro de la red Tendencia Vital, he reflexionado sobre una de las frases:
Ésta encabeza el título del post: Cuando el niño interior tiraniza.
Me pregunto: ¿Se prodría decir enemigo de uno mismo? Estamos pendiente de los peligros procedentes del exterior, y como nos conocemos poco, sin quererlo nos vamos haciendo enemigos de nosotros mismos.
Si no meditamos, reflexionamos e intentamos conocernos, seguimos manteniendo una consciencia infantil, que nos aprisiona en el pasado y cualquier solución que demos no será la más adecuada. Ésto nos lleva a estados de tensión, los cuales nos suelen salvar del peligro externo ¿Pero a costa de cuánto?, pues de aumentar la “tiranía del niño interior” que está muy próximo al “ego”.
Por todo lo anterior la conciencia debe evolucionar y aprender a “desapegarnos” del “ego”. “El poder del ahora” de Eckhart Tolle, es un buen libro guía para ello.
CUIDADO: Me refiero al niño interior caprichoso; porque tenemos un niño interior que es un encanto, aquel que se maravillaba por todo lo nuevo y tenía ganas de aprender y disfrutaba con ello, ese hay que seguir potenciándolo.
Fdo.: Toiescondido
Ésta encabeza el título del post: Cuando el niño interior tiraniza.
Me pregunto: ¿Se prodría decir enemigo de uno mismo? Estamos pendiente de los peligros procedentes del exterior, y como nos conocemos poco, sin quererlo nos vamos haciendo enemigos de nosotros mismos.
Si no meditamos, reflexionamos e intentamos conocernos, seguimos manteniendo una consciencia infantil, que nos aprisiona en el pasado y cualquier solución que demos no será la más adecuada. Ésto nos lleva a estados de tensión, los cuales nos suelen salvar del peligro externo ¿Pero a costa de cuánto?, pues de aumentar la “tiranía del niño interior” que está muy próximo al “ego”.
Por todo lo anterior la conciencia debe evolucionar y aprender a “desapegarnos” del “ego”. “El poder del ahora” de Eckhart Tolle, es un buen libro guía para ello.
CUIDADO: Me refiero al niño interior caprichoso; porque tenemos un niño interior que es un encanto, aquel que se maravillaba por todo lo nuevo y tenía ganas de aprender y disfrutaba con ello, ese hay que seguir potenciándolo.
Fdo.: Toiescondido
Dibujo de: Pere Virgili